Freixa Tradició

Freixa tradició. C/Sant Elies, 22. Barcelona.. Tel.: 93 209 75 59

Ya sabeis de mi interés en buscar y demostrar la calidad de la comida tradicional, así que  siguiendo con mi línea fuimos al mítico local Barcelones.

también en la decoración referentes a la tradición 

El Freixa tradició es la evolución del Racó d’en Freixa, mítico restaurante de la capital catalana, con más de veinticinco años de historia.

Hay que explicar que  Josep maria Freixa cedió su restaurante a su famoso hijo, Ramon Freixa con una estrella michelin y este a su vez, le devolvió el restaurante a su padre al irse a crearse su propio imperio en Madrid (Ramon Freixa, 2 estrellas michelin)y otros lares como Australia. 

Papa Freixa retomó el restaurante y le cambió el nombre al que tiene ahora: Freixa Tradició (tradición en Castellano), para que no haiga ninguna duda el tipo de local al que se accede.

El resultado es excelente, aunque los estrelladores michelin le den o retiren sus premios, el Freixa tradició, es una referencia en comida Barcelonina/Catalana tradicional de calidad. 

El local es de muy buen gusto, minimalista pero funcional, y con toques de tradición. Todo está decorado para sentirse muy agusto y en los baños se pueden tomar sopas.   

la coca de recapte..

Empezamos la noche con unos entrantes: un buñuelo de bacalao y una croqueta de rostido. El buñuelo estaba muy bien elaborado y la croqueta....mmm ¡celestial! No lo podeis dejar de pedir, además, se pueden pedir por unidades, y me parece una gran idea, ya que gente como yo, que lo intentamos probar todo, te da opción de saborearlas.

De primer plato pedimos unos pimientos escalibados y confitados, que la verdad, se desacían en la boca, y una Coca de recapte con tocino y arenque...sensacional, brutal, pero, eso sí, no apta para paladares sosos y light... 

Con los segundos fuimos de cara a barraca, y seguimos con un Bacalao con tomate, ciruelas y alioli... de brillante realización: al punto de cocción y de mezcla de aromas sensacionales. Y, como no, un Fricandó....buffff! cuando nuestras abuelas mueran y tengamos que enviar a los chicos de escuelas de cocina a aprender a hacer este clásico, tendran que venir a aquí a hacer “stage”. Sinceramente, perfecto. Tiene técnica, calidad, textura, sabor....Inmejorable...Vale la pena un viaje sólo para catarlo...

Seguimos con postres clásicos: Una manzana al horno: Correcta. Y una crema catalana, como no...Bien. Pero, no podíamos dejar el local sin probar el famoso mantecado....jejejee, muy bueno, probarlo también.

su majestad el frincandó

Respecto al vino, tienen una muy buena carta de vinos, no muy caros, y el trato del personal al líquido mágico, es correcto; Para mi gusto, un poco clásico, pero entiendo que los traten así viendo el resto de comesales del día que yo cené allí. 

El resto del personal fué muy correcto y el servicio muy bueno.

En definitiva, el Freixa tradició es un templo a la comida tradicional y un lugar donde llevar a nuestros amigos extranjeros y enseñarles sin concesiones, deconstrucciones ni esferificaciones lo que cocinaban (bueno la mía todavía cocina) nuestras abuelas y madres.

Precio por persona: 45€ (sin agua, vino ni café)

Puntuación: Local: 90/100  Personal: 80/100 Gastronomía 95/100 Vinos: 90/100 Relación Calidad/precio: 90/100

Tapas 24

Tapas 24. Carrer Diputació 269, Barcelona. Tel.: 934880977

En mi busqueda de la patata brava perdida, mi gran amigo y colaborador, David Escofet, me llevó a probar unas este verano. Son las del Tapas 24, restaurante que hoy tratamos.

El Tapas 24 es una derivación del restaurante con una estrella michelin Comerç 24, de Carles Abellán.

Abellán es un producto del Bulli Factory, estubo al cargo del Taialà cuando Adrià se hizo cargo de este establecimiento y más tarde en Hacienda Benazuza (Sevilla). Al independizarse se centro en la cocina tradicional, pero tratada como es devido.

El Tapas 24 es la derivación del Comerç24 hacia las tapas y se come eso: Tapas. Se come en mesas altas o en la barra, no aceptan reservas y muchos dias hay que hacer cola.

La presentación de los platos busca, expresamente, el look de los bares de tapas de antaño. Las servilletas de fino papel con estrellitas nos llevan  a aquellas barras de cuando eramos niños.

Muchas de las tapas son las clásicas: Bravas, bombas, frituras, etc, pero también hay adaptaciones y derivaciones muy logradas.

Al llegar a las mesas te reciben con unas pizarritas con los platos del dia y los cubiertos y servilletas te lo sirven en un sobre dónde están los platos clásicos.

Empezamos la comida con la tapa clásica, las bravas: Estas, aunque no me gustase el tipo de corte, son buenas y estarán en el famoso post en construcción “en busca de la patata brava perdida” (próximamente en maridajes). La patata es de calidad y está bien frita, en buen aceite; y sí, la salsa brava pica, ¿es obvio, no? No, es raro, cada vez cuesta más encontrar una salsa brava como dios manda.

Seguimos con un clásico, un arroz negro con sepia, que la verdad estaba muy bien logrado, el arroz estaba suelto, pero cocido, al dente, y el toque de las tiras de sépia por encima le da un toque de color y sabor interesante.

Xató con sardina ahumada i bacalao

Probamos también las tapas del día; Empezamos con un Xató con sardina ahumada i bacalao, esta interpretación del xató resultó  interesante el canvio de la típica anchoa por la sardina ahumada; era más fina y quizás más compleja. Seguimos con una crema de calabaza con salvia y foie...Hay que reconocer que el toque de la salvia a la crema de calabaza era conocido por mi, y me agrada, pero el de los taquitos de foie fundiéndose con la crema ha sido brutal... en vez de poner crema de leche, le das cremosidad con el foie y ¡Qué cremosidad!

Seguimos el festival con dos bocadillos... Sí, sí, bocadillos, no estoy loco, ya se que veníamos a comer tapas, pero quien no ha comido una hamburguesa o un bikini (mixto) en un bar de tapas.

Empezamos la segunda parte, con su famoso Macfoie Burguer. Jeje, ¿ya os pensais que me he vuelto loco y me he ido a comer fastfood? Noooo, la hamburguesa del Tapas es una hamburguesa de gran calidad, pero cocinada con un pan finito que lo recubre la carne y todo esto se funde con un foie fundido.... Sin palabras, ¡Teneis que probarlas!

El mítico bikini Comerç24

Para seguir con los bocadillos tópicos probamos el famoso bikini comerç24...  Os podeis imaginar que viniendo del Comerç24 no es un simple mixto. Es otra vez, una fina capa de pan con mozarella y jamón ibérica y...¡¡¡¡trufa negra!!!!! Provadlo, es impresionante y eleva  a nivel celestial un plato vulgar.

Los postres no fueron quizás, lo más elaborado, un milhojas de crema quemada de pastelería y fruta del tiempo fue nuestra selección, en cambio en el tema enológico, en el Tapas 24 se pueden catar cosas interesantes, a pesar de que la mayoría de veces, tenderíamos a tapear con una caña, podéis regalaros alguna joia enológica a buen precio. Su carta es corta, pero bien surtida.

Los lavabos son sencillos, pero correctos y el trato del personal es bueno. 

En definitiva, un bar de tapas de calidad, modernizando en la manera de tratarlas, pero sin llegar  al lado oscuro. Es un ejemplo hacia dónde tienen que ir los bares de tapas sin prostituirse en la globalización ni bajar calidad.

Precio por persona: 30€ (sin agua, vino ni café)

Puntuación: Local: 80/100  Personal: 80/100 Gastronomía 88/100 Vinos: 85/100 Relación Calidad/precio: 85/100

Restaurante Bidasoa

Restaurante Bidasoa Carrer d'en Serra 24. Barcelona 93 3181063
Siguiendo con la búsqueda de la cocina tradicional de calidad, a la qual os estoy sometiendo, os voy a descubrir uno de mis secretos: el Restaurante Bidasoa.

El restaurante está en el Carrer d’en Serra,  a unos metros del Carrer Ample, a la altura de la Basílica de la Mercé en el Gótico de Barcelona.

Es un restaurante de Barrio, fundado por los padres de Raul, uno de los socios, al cual se le uniría Jorge al jubilarse los padres de éste.

El Bidasoa es aquel tipo de restaurante que había a centenares cuando éramos niños, dónde se conocía al cliente perfectamente. Un local en el cual,  los platos que allí se servían eran  los de toda la vida, pero, sin olvidar la calidad de la materia primera y su perfecta elaboración.

Algunos diréis, ¿y éso es novedad? No, pero actualmente la cocina a derivado a dos ramas:

La primera, se basa en una globalización de gustos y locales: Seguro que os habéis fijado , cada vez hay más franquicias de restaurantes, cafeterías etc.. Esto hace cambiar  al viejo restaurante de barrio y adaptar sus productos a un público global, no vaya a ser que se pierda algún cliente; Resultado: Las patatas bravas son precocidas congeladas con una supuesta salsa brava(mahonesa sucia!!!) ....¡¡¡¡qué no pica!!!!! Pero.... ¿A qué jugamos?

La otra rama de la gastronomía, se ha pasado al lado oscuro, y aquí la influencia del Bulli ha hecho mucho daño: Los jóvenes que aspiraban a ser cocineros (y no a trabajar en una franquicia) querían ser Ferran  Adrià y, ¿cual fue  el resultado?, siguiendo el símil anterior de la patata brava: Deconstrucción de patata brava.... os lo juro, yo lo he probado...

Por éso, la importancia del Bidasoa, son de los pocos restaurantes de barrio que dan calidad y resisten a la lightuniformidagastronómica.... Y como en el cómic de  Asterix y Obelix,  resisten ahora y siempre al invasor unificador (en este caso, gastronómico). 

Al Bidasoa se va a comer platos y tapas como antes, tradicionales, de mucha calidad y muy buena ejecución, pero sin concesiones. tengo que explicar que, Jorge, su cocinero estuvo en el lado oscuro, incluso estudió hostelería, y se nota que domina la técnica. Afortunadamente, vió la luz y centró sus conocimientos en dignificar la cocina tradicional, su papel en el Bidasoa es brutal.

los famosos callos

Respecto a la comida, empezamos con unos huevos estrellados con txistorra, sensacionales (os lo dije, soy un clásico), seguimos con unas alubias estofadas.... tremendo plato!!! , rematados con un bacalao con tomate y pimientos del piquillo... Atención!! sólo este plato vale la pena el desplazamiento, la ejecución de este plato demuestra la maestría del chef y para acabar.... lo mejor: Los callos... Señores, confieso: vengo a este lugar a comer los callos del Bidasoa..... Sinceramente, aquí se demuestra una de mis teorías: puede la cocina tradicional ser de calidad???? Rotundamente sí, callos del Bidasoa, probadlos, y volveréis del lado oscuro.

Rematamos la velada, como no, con una crema catalana y charlando plácidamente con Raúl de fútbol i tonterías como esas.

En definitiva, el comportamiento del personal (Raúl) fué excelente y cercano, como trata a todos sus clientes (aunque algunos puedan parecer salidos de una novela del Carbalho de Vázquez Montalbán), en mi opinión, tendrían que mimar más el vino (este blog se llama Maridajes), por lo demás, nada que objetar...

Ah sí, todavía no hemos catado la famosa Fabada Asturiana...(sólo en ocasiones especiales como la final de la Champions, etc....)

Precio por persona: 15€(sin agua vino ni café)

Puntuación: Local: 88/100. Personal: 98/100. Gastronomía: 99/100. Vinos: 50/100. Relación calidad-precio: 85/100.    

Petit Comité

Restaurant Petit Comitè Passatge de la Concepció, 13 Barcelona Teléfono: 935 500 620

Leyendo “La Vanguardia” el pasado 17 de Agosto, me llevé una sorpresa: Fermí Puig, Chef del Drolma (1 estrella michelín) deja la dirección del restaurante del Hotel Majestic en Setiembre y a final de año el Petit Comité....Ambos restaurantes son del grupo Soldevila-Casals y el grupo Majestic, empresa con la que Puig trabajaba desde hace más de una década.... 

Mi reacción fué inmediata.¡¡¡No podía dejar de dedicarle un blog a el Petit Comité!!!... Así que reservemos una mesa y pusimos rumbo al centro de Barcelona, no vaya a ser que nos cerrasen el restaurante antes de que pasaramos por ahí!! 

Hay que decir que, aunque Fermí Puig fué el descubridor de Ferran Adrià y que en su estrellado restaurante del Hotel Majestic hace cocina de alta gama/autor,  él es uno de los máximos impulsores de la alta cocina tradicional y en el petit comité  es lo que ofrecen.

Hay que decir que el local es imponente, la decoración y la iluminación perfectas y, el trato del personal perfecto: Aunque, de escuela de hostelería, advirtieron enseguida que no me gusta que me agobien cuando paso una excelente velada, eso sí,  nunca me falto vino.

Respecto a la cena, simplemente perfecta. Platos de cocina tradicional, pero cocinados con una maestría de leyenda: Empecemos con una ensalada ..... i unas croquetas de rustido, que sólo ellas, ya merecen un viaje al petit comité. Le seguimos con un bacallà a la llauna magistral y unas galtes de porc amb samfaina de escándalo, ¡¡¡Qué textura la de las verduras de la samfaina!!!!! Para acabar los buñuelos de chocolate son de leyenda, prohibido salir del local sin hacer explotar una de estas pequeñas bolas en vuestra boca.

Bacallà a la llauna

En referencia al trato al vino, excelente, el hecho de que sólo llegar me ofrezcan una copa de cava, siempre es buena señal, que se confirmó con la carta (no muy larga, pero interesante) y las copas de máxima calidad. Además , se agradece que tengan los tintos conservados a temperatura idónea, ya que pedirse un “El Templari” (Garnacha y Morenillo de la D.O. Terra Alta) puede ser una aventura en pleno més de Agosto.

En definitiva, El Petit Comité, demuestra una de mis teorías, que dice que si tratamos la cocina tradicional como dios manda, es alta cocina. Mi consejo es que lo visiteis antes de que Puig se marche, y, esperemos que el nuevo local que monte el cocinero sea de un estilo similar.

Precio por persona: 39€(sin agua vino ni café)

Puntuación: Local: 98/100. Personal: 90/100. Gastronomía: 99/100. Vinos: 94/100. Relación calidad-precio: 92/100.       

Restaurant LA PLAÇA

Restaurant Hotel La plaça de Madremanya Teléfono: 972 490 487

La plaça

Si os perdéis por el Baix Empordà, en la zona conocida con el seudónimo de l’Empordanet, conoceréis una gente, cuya fama de genios/locos es altamente sabida. 

Estos habitantes del Norte de la península, con los que  hace ya algunas añadas que comparto territorio, son claramente peculiares. Algunos los llaman locos; Otros los califican de genios... Otros me explican que es culpa del viento del Norte (la Tramuntana) que les marca el carácter y  la personalidad...

La verdad, para un “Xava” como yo, éstos irreductibles catalanes no me parecen ni locos ni genios. Eso sí, nadie puede negar que mis vecinos tienen carácter...¡y mucho!

Y ya se sabe, siempre me han gustado los productos con personalidad y la gastronomía del lugar refleja estas peculiaridades del territorio. Y unos de los mejores ejemplos de éste carácter gastronómico es el restaurante del que hoy hablaremos.

Madremanya es uno de esos bonitos pueblos de piedra medievales que abundan en los que algunos llaman “la Toscana Catalana” y justamente, en la entrada de este bonito pueblo se haya la Plaça de Madremanya. El local son los bajos de una casa tradicional de piedra con la tradicional volta catalana típica de esta zona tanto las salas como los servicios son sin duda impecables.

Este Hotel resturant, empezó su andadura hace años de la mano de Jaume y Assumpta, consiguiendo notable éxito entre los gourmets de la zona. Pero hace ya unos  años, la gestión del  restaurant recae en el binomio Mónica-Vicenç Fajardo. Aunque los veteranos del lugar preferían el modo rústico de cocinar y sobretodo, las raciones de Jaume, el cambio al dominio de la técnica de Vicenç, es obvio.

Para esta visita, aunque la carta mostraba una impresionante colección de cocina con trufa, y una tentadora colección de platos de caza (volveré por la becada...), decidimos gozar con el menú degustación.

El objetivo, no era otro que criticar el modo de hacer de Vicenç en los fogones en este blog. La selección que nos ofreció en dicho menú empezó por los entrantes: “Crema de Patata con huevo de codorniz y Cantell”, “Vieira con tupinambos y lima”,seguimos con: “Cigala con parmentier y su esencia”, “Terrina de foie con dátil y avellana”, “Rodaballo con espárragos, alcachofas y ajos tiernos”, “chuleta de Agnus con pimiento y emulsión de salvia” y de postres: “Calabaza con naranja y coriandro” seguido por “chocolate, cacauete Y fruta de la pasión”.

La conclusión de lo catado es que, en La Plaça  la técnicas de cocina más moderna (tan en boga últimamente) se mezclan en su justa medida, pero sin olvidar la importante tradición de la gastronomía del Empordanet, dando mucha importancia a la
materia primera.

chuleta de agnus con pimiento

De entre lo degustado, cabe destacar la “vieira con tupinambos y lima”, sensacional  la “cigala con parmentier y su esencia” y muy interesante el “rodaballo con espárragos, alcachofas y ajos tiernos”, además de destacar en los postres la estravagante “calabaza con naranja y coriandro” me gustó el contraste gustativo de esta opción.

En respecto al tratamiento enológico, los que conocíamos el local en el pasado, agradecemos el cambio aplicado por Mónica, la sumiller. La carta está muy bien surtida, y los precios ajustados. Así que, dejaros asesorar por ella y disfrutareis. En nuestro caso compartimos nuestro menú con un Mestizaje 2008  el vino valenciano  de uva Bobal apoyado con otras aportaciones varietales.

En definitiva, buen local para disfrutar de la mezcla de modernidad de la técnica con la tradición en un ambiente magnifico y un trato mejor. 

Precio por persona: 43€(menú degustación, sin agua vino ni café)

Puntuación: Local: 95/100. Personal: 90/100. Gastronomía: 92/100. Vinos: 89/100. Relación calidad-precio: 88/100.       

Santi Santamaría D.E.P.:

Hace unos días la noticia salto a la actualidad, Santi Santamaria, primer chef catalán que consiguió tres estrellas michelin, falleció en Singapur a la edad de cincuenta y tres años, víctima de un ataque al corazón. Santamaria había viajado hasta allí para hacer el seguimiento de uno de sus restaurantes,que como es bien sabido tenía repartidos por todo el mundo. Santamaria había conseguido la frialera suma de siete estrellas michelin en sus restaurantes, poca gente en este país ha conseguido logros similares.

Pero últimamente, el chef de Can Fabes, se hizo famoso al criticar a la “cocina molecular” que tan en boga ha estado en nuestras latitudes al publicar su libro La cocina al desnudo (temas de hoy).

Muchos de sus colegas de profesión se le tiraron al cuello, y el antes que amilanarse, entró al trapo de una manera contundente. Quizás sus formas no fueron las más correctas, pero, conociendo al personaje lo entiendo.

Santi no era un cocinero de escuela de hostelería, dónde todos los niños quieren hacer esferificaciones. No,Santi era un autodidacta, enamorado de la cocina del territorio y tradicional; Y éso hizo, defender esta manera de ver la gastronomía... y, que queréis que os diga, lo que decía no era tan extrafalario...

Os pongo un ejemplo, si la industria alimentaría está obligada a indicar sus ingredientes y aditivos, ¿por qué los restaurantes no? Yo, no estoy en contra del uso de aditivos en la cocina...es más, soy un ferviente admirador del glutamato monosódico, ¿por qué no se me indica como ingrediente en la carta del restaurante y sí en el caldo que encuentro en el supermercado? Haceros la reflexión.

No voy a criticar a los restaurantes que usan la ciencia (que es la base de todo)en sus creaciones (me encantan) pero está bien defender la base de nuestra cocina y nuestros productos autóctonos. Para entendernos, unos nos dan una experiencia nueva y diferente, pero, a mí me enseñó a cocinar mi madre y mi iaia1, así que cuando me toca cocinar me fijo en los referentes de Santamaria, que son los míos.

Aunque Santamaria fue vapuleado por criticar lo intocable, de algo serviría, ya que, en estos momentos hay un verdadero boom de la cocina tradicional de calidad, y se han abierto numerosos locales de esta índole, (Petit comité, Fonda Gaig….),unos de los mismísimos hermanos Adrià nos sorprendió con uno de estos locales, el Inopia (aunque ahora, el proyecto ha canviado de nombre y manos) donde se hacían tapas tradicionales de alta gama...

Sirvan estas líneas para reflexionar sobre el genio y el hombre....Siempre nos quedaran su cocina y sus numerosos libros.

Así que Santi, allí dónde estés, des de aquí brindamos por ti ¡¡¡salud!!!

(1) iaia: abuela en catalán cariñoso

La butifarra dolça, el postre surrealista!!!

“Butifarra dolça” el postre surealista.

En el blog de hoy probaremos uno de los productos más raros de los que podemos catar en mi vecindario. Se trata de la “butifarra dolça” es decir, la longaniza fresca y dulce típica de algunas comarcas de alrededor de Gerona como el Gironès, La Selva i el Empordà.

Este embutido dulce se puede tomar tanto curado a modo de “fuet dulce” o bien, como será nuestro caso, en forma de longaniza fresca previo paso por la cocina.

Como curiosidad, dice la leyenda que, el Empordanés universal, Salvador Dalí, ofrecía este plato como “el postre surealista” cuando recibía en el mítico Motel Empordà de Figueras a sus invitados...

la butifarra dulce antes de cocinar

La butifarra dulce está elaborada como cualquier otra longaniza, con carne de cerdo, pero le añadimos una gran cantidad de azúcar (un cuarenta por ciento) más un poco de sal, piel de limón y canela. Si se deja secar se convierte en el fuet dulce que antes hemos indicado.

Hoy usaremos la fresca y la elaboraremos tal y como me enseñó Quim Matas de la Bisbal d'Empordà.

Pondremos la butifarra en una paella en la que habremos añadido una gran cantidad de garnatxa (vino licoroso típico de la D.O. Empordà) una ramita de canela y coceremos lentamente la butifarra, cuando ya cueza un buen rato, añadiremos unos gajos de manzana Granny Smith (interesante esta manzana ácida para contrastar con el dulce plato). Cuando la butifarra está cocida y el vino reducido , añadimos un poco de caramelo y acabamos de cocer uno o dos minutos.

Serviremos cortada a rodajas con unos trozos de manzana y bañándolo todo con la garnatxa reducida, y una vez en la mesa, nos choca probar una carne dulce con unas notas ácidas y aromas a limón y canela, que contrastan muy bien con la alta dulzura de este producto. Además si lo acompañamos de la manzana nos ayudará a hacerlo más suave!

al final de la cocción

El maridaje ideal será, claro está, un maridaje geográfico, además, el de unos de los ingredientes usados en la receta, es decir una garnantxa del Empordà. En este caso usaremos el Castillo de Perelada garnatxa de l'Empordà 12 años que cuesta unos 14€ la botella.

Espero que os haya gustado este producto, o como mínimo si un día estais por esta zona os lanceis a probar “El postre surealista!”

RESTAURANT El pont Nou

El pont nou, Camí de Cerdanya, 1. Caprodon Teléfono: 972 740 521

Voy a empezar la crítica a locales, aprovechando mi visita al Pirineo de Girona con una sugerencia de conocidos y guías gastronómicas diversas.

El port Nou de Camprodon está situado en el puente de nueva construcción que hay a la vista del histórico puente romano de esta población. El local es nuevo y con una decoración moderna, agradable y sin estridencias. Bastantes mesas, pero no se llegan a molestar. Servicios limpios y correctos. Si podéis pedir una mesa junto a las ventanas que dan al río, ya que las vistas lo merecen.

La carta no es muy larga, formada básicamente, por clásicos de la cocina catalana (carne a la brasa, escudella i carn d'olla...) con algún toque de modernidad o de escuela de hostelería. Para mi, perfecto para el tipo de clientela que vi.

pato laqueado con sésamo

Nuestra comida empezó con un aperitivo ofrecido por la casa que consistió en un intento fallido de filigrana: "tortilla de pan con tomate", plato que, todavía estoy intentando descifrar. Seguimos con unos entrantes bien elaborados pero, bastante clásicos: "carpaccio de ternera con parmesano" y "verduras salteadas con queso de cabra" y unos segundos dónde se empezó a ver el buen hacer del personal de cocina con una "carrillera de ternera con reducción de Ratafía" y un espectacular "Pato Laqueado con miel y sésamo." 

buñuelos de chocolate

Al final de la comida pudimos comprobar que con lo que más debe disfrutar el chef ha de ser con los postres ya que en su carta de postres se puede detectar un quehacer más que interesante. Nosotros probamos unos "buñuelos de chocolate"  magistrales y una "Crema catalana a nuestra manera" que de verdad, es muy recomendable.

En referencia a los vinos, hay que decir que es el punto débil. A excepción de la copa de cava ofrecida con los aperitivos  y de la lista de de postre a copas, todavía estoy esperando a ver la carta de vinos y, claro, que alguien que pone a su blog el nombre "Maridajes" acabe maridando la comida con Vichy Catalán, pues...

En definitiva, la comida fue de menos a más. Recomendable para aquellos que bajen de esquiar de las pistas cercanas o de hacer montañismo por la zona y quieren comer bien con excelente relación calidad-precio, aunque mi humilde consejo: traten mejor al mosto fermentado de uva.

Precio por persona: 27€(sin agua, vino, ni café)

Puntuación: Local: 80/100. Personal: 65/100. Gastronomía: 82/100. Vinos: 32/100 Relación calidad-precio: 70/100

 

inicio

Maridaje: "La unión armoniosa de la comida y el vino"... ¿Por qué he elegido este nombre para mi blog? Pues, por que refleja lo que es la vida para mi...

Para los que venimos del mundo del vino, no hay nada más triste que probar un nuevo caldo y no poder comentarlo. Luego, trasladamos ésto al resto de nuestras aficiones, y cuando descubrimos un nuevo queso, restaurante, plato, etc... además de convinarlo con un buen vino, nos gustaría "maridarlo" con aquellos con los que nos gustaría compartir, discutir, criticar el nuevo descubrimiento.

Es por ésto que, humildemente, he decidido crear este blog, para compartir con todo aquel a quien le interese mis descubrimientos, catas, recetas, etc... Para que en el fondo, pueda hacer el maridaje perfecto.